Los textos folclóricos, al contrario de los textos de autor, no tienen autor ya que han sido creados por el pueblo y se han ido transmitiendo oralmente lo que haciendo que cambie con el tiempo.
En la literatura folclórica también podemos encontrar los tres géneros literarios que llevamos viendo todo el curso: verso, prosa y teatro (drama).
Para poder entender mejor lo que es un texto folclórico y diferenciarlo de otros textos que no lo son, tenemos que ver cuáles son las características de estos textos:
- No tiene autor: Ya que es de transmisión oral. No es porque no se conozca el nombre, sino porque se ha ido creando con el paso del tiempo y aquellas personas que han ido contando esas historias en algún momento. De una historia real surge una historia folclórica puesto que se parte de una historia real, pero se van introduciendo cosas nuevas con fantasía. Sin embargo, es imposible conocer las versiones originales.
- Multitud de variantes: Porque no tienen autor y porque se han desarrollado en distintos lugares y en distintos siglos. Por lo tanto, una misma historia puede varias, por ejemplo, el espacio donde transcurre la historia (bosque, selva,…) o incluso los personajes malvados.
- Variables y adaptables: Pueden y deben cambiar (los Cuentacuentos lo hacen siempre). Es bueno conocer a los niños para adaptar los cuentos a sus edades, gustos y necesidades.
- Textos populares: Son textos del pueblo que corrían de boca en boca. No son textos cultos ya que no atienden a la forma, lo que importa es el contenido. Eran considerados “textos del pueblo” y no literatura. Como es algo popular, refleja las costumbres del pueblo y sus miedos, sueños, deseos,… A la gente siempre le han gustado las personas famosas, de ahí que en la mayoría de los cuentos apareciesen príncipe y princesas.
- No son textos infantiles: Ni lo serán jamás. A estos cuentos también se les conoce como “textos del hogar” porque se transmitían al calor de la lumbre. Se contaban las historias antes de irse a dormir después de un día de trabajo. No se contaban a los niños para que se durmieran sino para entretener a toda la familia y se trataban todos los temas (miedo, aventura, amor, fantasía,…). Sin embargo, si hubiera que determinar un receptor serían los adolescentes porque la mayoría de los protagonistas son personas que acaban de salir del entorno infantil y se ven frente a la vida adulta hasta que se casan (simbolización de que el protagonista forma su núcleo familiar, del cual ha salido). Suelen ir acompañados de alguien que les aconseje (hadas) que reflejan el viaje iniciático que tienen los niños para enfrentarse a la vida adulta. Se les enseña que hay que crecer, pero, sin embargo, tienen enseñanzas para todos los miembros de la familia.
- No son textos machistas: Son textos que reflejan la realidad de cada época, y si no nos gusta o nos incomoda se puede cambiar y adaptar, que para eso es un texto folclórico. Esta característica nos la mencionó la profesora como curiosidad para que entendamos que la mayoría de los cuentos provienen de épocas machistas, pero que en muchos de ellos se revelaban contra eso como en el caso de La Cenicienta.
PROSA FOLCLÓRICA.
Los cuentos folclóricos se están perdiendo debido a que los padres ya no los cuentan. Los padres cuentan libros de autor y se deberían de leer los dos tipos. Actualmente se hacen muchas adaptaciones, la gran mayoría por Disney, pero son sólo adaptaciones.
Se suelen coger historias de los Hermanos Grimm, los cuales recopilaban y adaptaban. Una cosa que debemos tener en cuenta es que ninguna de estas historias son originales, todo son versiones.
Existen distintas clasificaciones de los cuentos folclóricos hechas por distintos autores, entre los que cabe destacar:
- Vladimir Propp: Sigue una corriente estructuralista; es decir, que le interesaban mucho las estructuras de los cuentos y se dedicaba a investigar sobre ello. Estudió los componentes y estructuras de los cuentos folclóricos rusos, recogiendo primero los cuentos y dividiéndolos en cuatro grandes bloques:
· Los mitos: Textos que nacen de religiones que ya se han perdido. Tratan de explicar a través de historias sencillas para el pueblo hechos naturales, psicológicos o sociales. Los personajes son héroes o dioses. (Mito de “Eros y Psique”).
· Cuentos de animales: Todos los protagonistas son animales. Aquí podemos encontrar cuentos folclóricos que se escriben para entretener y divertir, y no tienen moraleja aunque pueden tener enseñanza, pero no se escribe con esta finalidad. Otra modalidad de cuentos folclóricos que nos encontramos son las fábulas, que se escriben siempre con una moraleja. Los personajes de las fábulas son arquetipos y siempre simbolizan algo (zorro= astucia; ratón= inteligencia;…). El primero en recoger y poner por escrito fábulas fue Esopo (no las escribía él mismo). El ejemplo que tenemos en España es El Conde Lucanor, donde Don Juan Manuel recoge un cierto número de fábulas. Estas fábulas las cuenta un sirviente a su amo con la finalidad de aconsejarle.
Su libro más conocido es Morfología de cuento.
· Cuentos de fórmula: Aquellos que tienen fórmulas (como su propio nombre indica) que se repiten. Entre este tipo de cuentos podemos distinguir:
# Cuentos mínimos: Básicamente, para vacilar a los niños (¿Quieres que te cuente la historia de María Sarmiento que se fue a cagar y se la llevó el viento? Sí. No te he dicho que me digas ni sí ni no, yo te he dicho que si quieres que te cuente la historia de María Sarmiento que se fue a cagar y se la llevó el viento. Sí. Y así sucesivamente).
# Cuentos acumulativos: Aquellos que en la historia tienen acciones que se repiten (La Ratita presumida, Sal de ahí chivita,…).
· Cuentos de hada o maravillosos: Aquellos en los que aparece personajes con cualidades mágicas. No tienen por qué ser hadas, pueden ser otros seres mágicos (El gato con botas, El zapatero y los duendes, La Cenicienta, La Bella Durmiente, Blancanieves,…).
- Gianni Rodari: Trabaja con la fantasía y con la creatividad de los niños. Cree que esto se fomenta contándoles cuentos folclóricos. Su clasificación es la siguiente:
· Cuentos de animales: Al igual que Vladimir Propp, todos los protagonistas son animales. · Cuentos mágicos: Parecidos a los cuentos de hadas de Propp, pero Rodari incluye los mitos, temas sobrenaturales y cosas mágicas.
· Cuentos de bromas o anécdotas: Cuentos parecidos a chistes largos con partes cómicas.
- Sara C. Bryan: Se centra en su experiencia, por lo que su clasificación de los cuentos folclóricos atiende a la edad de los niños.
· 3- 5 años: Historias rimadas, historias con fragmentos versificados, historias de animales personificados, cuentos burlescos y cuentos de hadas. Piensa que a los niños menores de 3 años no es necesario leerles cuentos, pero nosotr@s ya sabemos que sí.
· 5- 7 años-> Folclore (leyendas locales): Cuentos de hadas y burlescos, fábulas, leyendas, narraciones de historia natural.
· Mayores de 7 años: Folclore, fábulas, mitos y alegorías, parábolas de la naturaleza, narraciones históricas, historias reales, narraciones humorísticas.
DRAMA FOLCLÓRICO.
(Parte de los apuntes que nos dejó Sandra a Almu, Raquel, Natalia y a mí porque nos fuimos a una charlas).
En cuanto al drama folclórico, no existen textos folclóricos porque no se puede transmitir oralmente. Sin embargo, existen representaciones y hay tres tipos:
- Representaciones religiosas: Como representaciones de Navidad. Algunas veces está preparado y otras se improvisa.
- Representaciones festivas o erótico festivas: Se hacían en las fiestas de los pueblos. Se hacían piques entre mujeres y hombres, juegos, gymkhanas,…
- Cómicos de la lengua: Personas que se ganaban la vida haciendo representaciones teatrales por los pueblos, trasladándose de uno a otro aprovechando las fiestas. Tras su actuación, se pasaban con la gorra para ganar dinero y decían alguna frese original. No tenían conocimientos académicos por lo que improvisaban y se les consideraba lo más bajo de la sociedad (gente pobre y arruinada, casi a nivel de las prostitutas). Una de las pocas representaciones folclóricas que existen son las obras que dedicaban a los niños, los Títeres de cachiporra (representaciones con marionetas típicas de los pobres, que eran más fáciles de fabricar y usar). Todas estas obras tenían el mismo argumento: aparece un chico el cual tiene algo al que quiere mucho y hay un personaje malo que se lo quiere quitar y cuando el personaje se despista, el malo se lo quita. Entonces el protagonista interactúa con el público y con su ayuda vuelve a recuperar aquello que quiere tanto. El éxito de estas obras era la habilidad del actor para interactuar con su público.
POESÍA FOLCLÓRICA.
Si las poesías folclóricas son infantiles, lo tenemos que tener muy en cuenta ya que son muy importantes.
Siempre se fundamenta en el “nonsense” puesto que son poemas absurdos, no tienen sentido.
Aquí incluimos las danzas de corro, que también cambian por la transmisión oral de boca en boca, que se van adaptando al contexto. A veces incluso cambia su función (algunas canciones que cantábamos para saltar a la comba antes se usaban para sortear). La pena es que estos juegos y canciones folclóricos se están perdiendo y tanto los padres como los maestros deberíamos dedicar un rato del día a enseñárselas a los niños.
HISTORIA DEL FOLCLORE.
En el siglo XVIII el recopilador más importante es
Perrault. Es un recopilador y pedagogo francés que vivía en la época del rey Luis XIV (el rey sol) al que le gustaba que le entretuvieran (cuentos e historias) y Perrault era uno de los que le entretenían porque le gustaba que le entretuviese gente del pueblo.
Perrault se interesó por los cuentos que la nodriza contaba a sus hijos pequeños, como los cuentos de Gianbattiste, las narraciones de Bocaccio y las leyendas celtas. Recogió estas historias y algunas ideas que posteriormente adaptó con una intención moralizante, apareciendo al final de cada cuento una moraleja, a los que llamaba Contes de fées (no todos los cuentos folclóricos tienen moraleja, como ya he desarrollado anteriormente).
En este siglo, también es importante que destaquemos a otra recopiladora importante que también hacía adaptaciones de las historias que recogía. Esta mujer es Madame Genlis.
En Inglaterra, John Newberry abrió una librería en la que publicaba los libros que él recopilaba y adaptaba (textos folclóricos ingleses).
En España había fabulistas: Iriarte (cogía fábulas y las adaptaba, poniendo sus propias moralejas en verso) y Samaniego (escribía fábulas morales para los alumnos de un seminario).
En el siglo XIX (romanticismo y nacionalismo) aparecen los Hermanos Grimm, recopiladores alemanes muy importantes. Lo que pretendían era conservar las historias alemanas (sentimiento nacionalista).
Alguien les propuso recopilar cuentos alemanes para que no se perdieran y, sin dudarlo, aceptaron. Apenas adaptaban porque, como ya he dicho, solo les interesaba que no se perdiera lo propio alemán (finalidad conservacionista). Cuando se editaron y publicaron esas historias, se convirtieron en best- seller porque los niños no sabían leer. Se hicieron tan famosos, que hasta hicieron segunda edición, que en esa época era difícil. El editor les dijo que tenían mucho éxito pero que muchos padres se estaban quejando por lo que relataban, que consideraban que no era adecuado para los niños (malos comportamientos, sexo,…). Como consecuencia, el editor le pidió que cambiasen los cuentos. Al principio se negaron porque no los hacían para que el público fuesen niños, pero al final cedieron y cambiaron, por ejemplo, las madres “malas” por madrastras, añadían finales distintos para que no fuesen tan duros los cuentos (el leñador de caperucita), etc.
En Dinamarca, destacamos a Hans Christian Andersen, que escribió más en la segunda mitad del siglo XIX (realismo). Sus cuentos son adaptaciones, aunque también escribía sus propias historias totalmente realistas en las que destaca los problemas sociales (La cerillera). Escribía este tipo de historias porque se sentía bastante discriminado por ser homosexual, por lo que sufrió mucho y lo refleja en sus cuentos. Escribió una autobiografía en la que él es El Patito feo.
En España, muchísimo menos importante que todos los anteriores, destaca el Padre Coloma. Fue un adaptador de historias folclóricas, cambiando los personajes malos por el demonio y las hadas por vírgenes o ángeles.
Propp observó que todos los cuentos folclóricos seguían la siguiente estructura: Los protagonistas pasan de la infancia a la vida adulta pasando por un “viaje iniciático”, que es el camino o recorrido que hacen hasta llegar a ser adultos. El protagonista siempre parte del hogar, que simboliza la protección, abandonando la infancia. Posteriormente, pasa por una serie de pruebas, las cuales son simbólicas (viaje iniciático) y llega a la edad adulta, que se representa con la boda y un núcleo familiar, el que forma siendo ya una persona adulta.
Nosotros, los maestros, debemos coger los textos folclóricos y adaptarlos a nuestros alumnos puesto que nosotros sabemos de psicología evolutiva/infantil. Hay que adaptarlos atendiendo a las características de los pequeños de nuestra aula.
Para poder hacer bien una adaptación tenemos que saber reconocer las pruebas simbólicas del viaje iniciático de los protagonistas, manteniéndolas todas. Cuando adaptamos un texto podemos cambiar el protagonista, el tiempo en el que transcurre la historia, el entorno, el final de la historia… Pero lo que se debe mantener en todo momento es el viaje iniciático, que es lo más importante.
* Conviene recordar que ningún cuento folclórico es original puesto que, al ser de tradición oral, ya ha cambiado tanto a lo largo del tiempo, que no se puede hablar de original.
MOTIVOS EN LOS CUENTOS DE HADAS.
Los elementos básicos de la historia son los leitmotivs. Los motivos, al igual que el viaje iniciático, es algo que hay que respetar a la hora de hacer la adaptación (en Blancanieves, el motivo del viaje iniciático es que huye). Los motivos son los siguientes:
- El sol y la noche (cosas mágicas, lo peligros del bosque son más grandes,…) como realidad e irrealidad.
- Búsqueda del amor.
- El hermano más pequeño.
- La muerte y la resurrección.
- El huérfano maltratado (Harry Potter).
- Fuga y persecución (son causas; es decir, salir del núcleo familiar).
- Viajes y búsqueda (muchas veces por obligación. Son causas; es decir, salir del núcleo familiar).
- Tesoros ocultos física (Aladino, Pulgarcito,…) o psicológicamente (mito de Cupido y Psique, la Bella y la Bestia,…).
- El reino de los muertos o el reino de las hadas (como muerte real vimos como ejemplo la abuela de caperucita y como muerte simbólica/ ficticia a la Bella Durmiente; aunque también se da la resurrección, cuando el príncipe resucita a la princesa con un beso).
En cuanto a los personajes de los cuentos de hadas, que hay que mantenerlos, no se les puede cambiar de rol, solo se puede cambiar el sexo del protagonista, destacamos los siguientes:
- Malos: Te someten a pruebas para que te hagas más fuerte en el viaje iniciático. Nos encontramos con enemigos (madrastra, lobo, hambre,…), gigantes (ayudan al enemigo o directamente van contra el protagonista) y los ogros (son los únicos que comían niños, aunque se identifiquen con brujas).
- Buenos: Son ayudas. Héroe o heroína (Blancanieves, Caperucita,…), hadas (ayudantes del héroe/ heroína, como las hadas madrinas/padrinos; son personas que siempre están en los momentos duros de la vida, sirve de protector, de ayuda, como el gato con botas para el molinero) y los animales y objetos mágicos (ratones que se convierten en caballos para tirar de la carroza de la cenicienta, la lámpara maravillosa, el espejo mágico,…;es decir, son aquellas ayudas externas que recibimos de la vida para avanzar).
- Brujas, magos y duendes: A veces aparecen como malos y otras veces como buenos (Enano Saltarín- malos, El Zapatero y los Duendes- buenos,…).
CRITERIOS PARA SABER SI UN CUENTO FOLCLÓRICO ES BUENO.
- Debe tener indicado en las primeras páginas el nombre del traductor, recopilador o adaptador.
- No son recomendables los libros “365 cuentos” porque son síntesis de los cuentos, no son cuentos enteros.
- Evitar versiones infantiles de los cuentos folclóricos.
- Pueden haber buenas adaptaciones pero tiene que venir indicado el nombre del adaptador.
* Adaptación: Cambiar algunos aspectos de la historia, EXCEPTO el motivo de la salida de casa por el cual se comienza el viaje iniciático (voluntariamente o huída), situaciones o problemas que se dan durante el mismo y e rol de los personajes.
* Recopilación: Como su propio nombre indica, consiste en recopilar cuentos e historias folclóricas. Éstas son totalmente respetadas; es decir, no se modifica nada de la historia (se recopila, no se modifica).
* Traducción: Traducir un cuento o historia. Al igual que la traducción, no se modifica/cambia nada de la historia.